En estos últimos meses del 2022, el Bitcoin (BTC) ha cotizado a la par que las acciones, ya que ambos activos han luchado contra los factores macroeconómicos imperantes, encabezados por la disparada inflación y las subidas de los tipos de interés. Sin embargo, la volatilidad de Bitcoin parece enfriarse en comparación con la de las acciones tradicionales, ya que la principal criptomoneda muestra inminentes signos de desvinculación con la renta variable.
Curiosamente, desde el 7 de octubre, el índice Dow Jones que sigue a las 30 mayores acciones industriales es más volátil que Bitcoin, indican los datos compartidos por ZeroHedge.
Este último logro del Bitcoin pone de manifiesto la madura naturaleza del activo, sin olvidar que esta criptomoneda ha sido clasificada como una de las inversiones más volátiles.
Particularmente, los defensores del Bitcoin han mantenido que, una vez que está criptomoneda madure en base a una mayor adopción, el activo será menos volátil y cotiza como un activo tradicional más.
La volatilidad histórica de Bitcoin
En general, aunque el Bitcoin ha estado marcado históricamente por su volatilidad, los mercados financieros tradicionales suelen ser mucho más estables. Sin embargo, el cambio en la volatilidad puede atribuirse al retroceso de Bitcoin desde los máximos históricos alcanzados en noviembre de 2021, y que han visto al activo consolidarse en torno a los 20.000 dólares durante semanas.
En este caso, el actual nivel del Bitcoin está siendo tratado como un fondo temporal después de la impresionante carrera alcista que culminó en un máximo histórico de casi 68.000 dólares.
Al mismo tiempo, la disminución de la volatilidad de Bitcoin ha surgido a raíz del establecimiento de un dólar fuerte que vio a las monedas fiduciarias globales perder valor en comparación con esta moneda estadounidense. A este paso, la subida del dólar podría impactar potencialmente de forma negativa en las carteras de valores acompañado de una subida de los precios de las materias primas.
Sin embargo, el Bitcoin se ha mantenido estable, y los inversores de algunas regiones han recurrido a este activo como cobertura contra la subida de los precios.
Mientras tanto, el Bitcoin sigue consolidándose por debajo de los 20.000 dólares, mientras los bears y los bulls luchan por hacerse con el control. Al cierre de esta edición, el activo cotizaba a 19.500 dólares con pérdidas inferiores al 1% en las últimas 24 horas.