Los analistas sugieren que Rusia tiene el potencial de aumentar su participación en el hashrate global de bitcoin al 18%.
Una situación atractiva para los mineros
Según los expertos de Intelion Information Systems, Rusia tiene el potencial de atraer hasta la mitad de los mineros de criptomonedas de Kazajistán y aumentar su dominio en el sector de la criptominería.
Predicen que la participación de Rusia en el hashrate global de bitcoin podría alcanzar el 18%, ya que otros países enfrentan desarrollos perjudiciales y políticas más estrictas hacia la industria.
El abundante suministro de electricidad de bajo costo de Rusia, alimentado por fuentes de energía nuclear e hidroeléctrica, es una de las principales razones por las que se ha convertido en un destino codiciado para los criptomineros.
Se espera que la reciente introducción de legislación por parte del gobierno ruso que legaliza la minería de criptomonedas aumente aún más el atractivo del país para los mineros.
Quinta entre las principales ubicaciones mineras
Actualmente, ocupa el quinto lugar entre las principales ubicaciones mineras, la infraestructura energética bien desarrollada de Rusia y los bajos costos de electricidad la convierten en una opción atractiva para los mineros que buscan reubicarse.
La reciente migración de mineros de China tras la represión del país contra la industria en 2021 destaca aún más el potencial de Rusia para convertirse en un actor importante en el mercado de la criptominería.
“Rusia tiene todas las oportunidades para cambiar la jerarquía existente del mercado global de criptominería. El país tiene todo lo que necesita para esto: bajo costo de electricidad, reservas de capacidades libres, infraestructura energética desarrollada en muchas regiones”.
Timofey Semyonov, director ejecutivo de Intelion Data Systems.
Según los expertos de Intelion, para promover un entorno de inversión ventajoso, la minería en Rusia debe ser reconocida como una “actividad comercial legítima con regulaciones bien definidas”.
Los analistas anticipan que la crisis bancaria en curso en los EE. UU. y Europa generará una demanda creciente de bitcoin como herramienta de cobertura y aumentará el interés en las criptomonedas entre las instituciones financieras convencionales, lo que conducirá a un aumento en la actividad minera global.
Si esto sucede, Rusia podría aumentar su participación en el mercado global de criptominería y podría cambiar el equilibrio de poder en la industria con Rusia ganando más control sobre la producción de criptomonedas como bitcoin.
Esto podría tener una serie de implicaciones para el resto del mundo, incluida una mayor competencia entre los mineros, cambios en la dinámica del mercado y cambios potenciales en el panorama geopolítico a medida que Rusia se vuelve más influyente en el espacio criptográfico.